Oficialismos invencibles y su relación con bienestar. El caso de San Luis

Introducción

Hay una idea racionalista de la política, que indica que si el gobierno de un país o una provincia contribuye a la prosperidad y bienestar de la población, ésta recompensa a los funcionarios estatales o al partido político en el poder con apoyo a su gestión. De ésta forma, los votantes ratificarían la continuidad de un gobierno en elecciones sucesivas. Esta perspectiva, utilitarista de la política, es compatible con la Teoría de la Elección Racional: conjunto de ideas políticas que reconocen de antemano la presencia de un sujeto racional y egoísta que conoce perfectamente sus necesidades, las cuales están relacionadas con la maximización de sus beneficios (materiales). Por lo tanto, si un gobierno, por medio de políticas públicas visibles para la población, contribuye a la prosperidad de la gente, ésta votará por el partido político oficialista en la elección siguiente de cargos gubernamentales. En caso contrario, si los votantes ven un perjuicio su situación económica, votarán por el partido de la oposición que mejores propuestas ofrecieron a la población.

Si esa fuese la explicación, vista quizás como única por algunos, de la permanencia continua de partidos políticos en el gobierno de un Estado, se encontrarían muchos casos en Latinoamérica donde los oficialismos se mantuvieron constantemente el poder. Baste citar el caso del Partido Revolucionario Institucional (PRI) que gobernó México durante más de 70 años seguidos. Ejemplos más recientes temporalmente son los gobiernos: de Frente Para la Victoria en Argentina con los Kirchner; del Partido de los Trabajadores en Brasil con Lula Da Silva y Dilma Rousseff; de Hugo Chávez en Venezuela con su Movimiento Patriótico primero, luego con el Partido Socialista, y la continuidad con Maduro; del Movimiento al Socialismo en Bolivia que se mantuvo tres presidencias consecutivas con Evo Morales; y, entre otros casos, del Frente Amplio que gobernó Uruguay con Tabaré Vázquez y Mujica. En éstos países se dio lo que Sartori describió como sistemas de partido predominante, situación en la cual un partido político se hace con más de 3 elecciones gubernativas consecutivas y la oposición no tiene chances electorales contra el oficialismo.

Los casos de sistemas de partido predominante se dieron también en áreas subnacionales, como distritos, provincias, municipios. Tal es el caso en Argentina de la provincia de San Luis. Allí, desde el regreso de la democracia, los hermanos Rodríguez Saa ganaron con el Partido Justicialista todas las elecciones gubernamentales hasta 2011, cuando ganó la elección otro miembro del oficialismo, Claudio Poggi. Adolfo Rodríguez Saa gobernó la provincia desde 1983 hasta 2001, año en que renunció a la gobernación para asumir como presidente interino de la Nación luego de la renuncia de De la Rúa y Puerta, siendo reemplazado en San Luis por la entonces vicegobernadora Alicia Lemme. Quien siguió presentándose en elecciones fue Alberto Rodríguez Saa que gobernó por dos períodos consecutivos entre 2003 y 2011. En las elecciones a Gobernador de 2015, volvió a ganar Alberto y es el actual primer mandatario de la provincia.

El interrogante que el presente ensayo posee es saber si hubo políticas públicas elaboradas por los gobiernos de los hermanos Rodríguez Saa en San Luis que contribuyeron al bienestar de la población de su provincia desde 1983 a 2011. Es relevante la respuesta a ese planteo porque explicaría una causa (quizás la más importante) por la cual el Partido Justicialista fue elegido siempre por los ciudadanos de San Luis para seguir en la gobernación: esto es, que la prosperidad de la población en general creció, y ésta no quiere cambiar de gobierno por la conformidad de la permanencia de la misma élite dirigente.

La investigación se abordará poniendo foco en dos orientaciones de políticas públicas principales para mejorar el bienestar de la población. En primer lugar el crecimiento económico de la provincia, donde se indagará si hubo política industrial, fomento al consumo, beneficios impositivos, la protección del empleo, aumento de salarios, entre otras cuestiones. Y en segundo lugar, la construcción de viviendas para la población, ya sea de iniciativa gubernamental por medio de planes de vivienda, o bien el fomento a la construcción de casas por iniciativa individual.

El motor del crecimiento económico puntano: la industria.

La provincia de San Luis antes del regreso de la democracia (1983) era un distrito de estructura primaria y terciaria básicamente. Las actividades agrícolas ocupaban la principal fuente de ganancia de la provincia dentro del entorno nacional. La urbanización era escasa, centralizada básicamente en las ciudades de San Luis (capital provincial) y Villa Mercedes, mientras que había varios pueblos (menores de 10.000 habitantes) que funcionaban como centros de distribución de actividades agropecuarias o como villas turísticas en las sierras de San Luis y la de Comechingones, tal es el caso de la Villa de Merlo.

La estructura económica de la provincia comenzó a cambiar desde 1983. Durante el nuevo gobierno de la Nación de Raúl Alfonsín, electo democráticamente, el Congreso aprobó la ley 22.021 de Régimen de Promoción Industrial que preveía reducciones impositivas a las industrias nuevas. Mientras que la ley 22.702 estableció que las provincias de San Luis, Catamarca y la Rioja entraban en el mencionado Régimen, donde las empresas que se radicasen allí quedaban eximidas de pagar el impuesto a las Ganancias, sobre el capital de las empresas y al Valor Agregado. Las inversiones industriales comenzaron a llegar a la región y San Luis fue la principal beneficiaria. Esto se puede explicar porque el gobernador Adolfo Rodríguez Saa creó parques industriales en la Capital y en Villa Mercedes, facilitando la instalación fabril. Además, San Luis estaba cruzada por las rutas nacionales N° 7 y N°8, claves para la circulación de mercancías entre Chile, Argentina y Brasil, por lo que la ubicación de ésta provincia era favorable a las inversiones.

El crecimiento industrial fue vertiginoso: en 1983 la industria tenía un valor agregado de 8.665.000 pesos, y pasó a tener en 1991 un valor de 142.682.000 pesos. Es decir que según Olguín[1], el sector industrial multiplicó por veintiocho su valor, convirtiéndose en el principal sector de generación de riqueza provincial. El Producto Bruto Geográfico de la provincia se cuadruplicó durante la década del ´80, gracias al motor de la industria.

Pero en 1989 el Congreso sancionó la Ley de Emergencia Económica, que eliminaba subsidios y subvenciones de todo tipo, por lo que el Régimen de Promoción Industrial quedó suspendido. Ello supuso un freno en las inversiones de tipo industrial en San Luis.

Fue entonces cuando el Gobernador Adolfo Rodríguez Saa y su hermano, el senador por San Luis, Alberto Rodríguez Saa, comenzaron a gestionar el regreso de los beneficios impositivos para la industria. Para ello se acercaron al presidente Carlos Menem, miembros todos ellos del mismo Partido Justicialista, y también buscaron la ayuda del Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional para forzar al gobierno. Así fue que en 1991 por decreto presidencial, se restableció el Régimen de Promoción Industrial para la Provincia de San Luis. Luego en 1996 el Poder Ejecutivo Nacional firmó el Decreto 804 mediante el Ministro de Economía Domingo Cavallo, por lo que se prorrogó el Régimen por 15 años más hasta 2011.

Con ese fomento a la inversión industrial en San Luis, el crecimiento económico fue muy grande. En 1993 el Producto Bruto Interno de la provincia era de 236.504.981 pesos y hacia 2006 el PBI pasó a ser de 654.438.985 pesos. Así se puede observar que entre 1993 y 2006 el crecimiento económico fue interrumpido solo entre 1999 y 2001, la época de la crisis económica del país.

El grueso de las instalaciones fabriles (90%) se radicó en las ciudades de Villa Mercedes y en la Capital. La participación de la industria en el PBI de la provincia fue muy grande en ese período: la actividad secundaria ocupaba un 58% en 1997, y un 46% en 2007.

En cuanto a la evolución del empleo en comparación con el crecimiento económico, se puede observar que el desempleo fue similar que el total país desde 1980 hasta 1984. Pero desde 1985 hasta 2010 se observa que la tasa de desempleo comienza a ser menor en San Luis que en toda la Argentina. Esto se debe al crecimiento económico e industrial que la provincia tuvo. Cabe destacar el muy bajo porcentaje de desocupación registrado después de 2003: entre 2004 y 2010 el desempleo promedio en San Luis era de 2%, mientras que en el país era de 10% para el mismo período. Se observa como el crecimiento industrial desde 2003 en todo el país repercutió muy positivamente en San Luis generando gran cantidad de puestos de trabajo. Se puede observar además que el desempleo siguió los ciclos de crecimiento económico y depresión del país: entre 1995 y 1997 primero, y entre 2000 y 2002 después, el desempleo creció.

La industrialización fue el motor del crecimiento económico de la provincia que impulsó todas las demás actividades, entre ellas la presencia del Estado provincial como generador del empleo. Las actividades que más emplean trabajadores son la industria, comercio y administración pública, las tres con un porcentaje alrededor del 14% cada una. Le siguen los empleados de la construcción y los docentes con un porcentaje aproximado del 8% cada uno, y luego sigue el resto de los rubros de forma decreciente. Es decir que la industria, en una provincia antes signada por la agricultura y el comercio, permitió movilizar la economía y generar empleos en otros rubros (como la construcción, el comercio y el transporte).

Sin embargo, mirando aún el cuadro anterior, marca que la presencia del Estado (provincial sobre todo) es el primer empleador de trabajadores. Si se suma a la administración pública, los docentes, los del sistema de salud, suministro de electricidad y agua, entre otros, el Estado emplea a aproximadamente el 29% de los trabajadores en blanco de la provincia. De hecho, la participación del Estado como empleador llega al 34,9%.

De esta forma, se puede afirmar, que en primera instancia fue la industria la que movilizó la economía de la provincia, haciéndola crecer, y en segunda instancia el Estado provincial ayudó en ese crecimiento empleando a cada vez más trabajadores, resultando convertirse en el principal empleador de San Luis.

Así, en definitiva, fue mediante el impulso industrializador que realizaron el Estado nacional, el gobierno de la provincia y las inversiones del capital privado, que posibilitaron el crecimiento económico de San Luis, y por ende, la creación de empleo y la reducción significativa del desempleo. Hay que destacar que si bien no analizamos el fenómeno de la distribución de la riqueza, ni la pobreza estructural de la provincia, se puede afirmar a grandes rasgos que mientras crece la economía y el empleo, puede aumentar la prosperidad de la población. Y esto último, como se mencionó en la introducción, puede ser una de las causas de la aprobación de las gestiones de los hermanos Rodríguez Saa al frente de San Luis.

La participación del gobierno en la construcción de viviendas.

Ahora analizaremos la cantidad de viviendas construidas en distintos períodos y su relación con la población. Para ello nos serviremos del siguiente cuadro:

Año censado 1991 2001 2010

Población 286.458 367.933 432.310

Viviendas 68.823 101.623 142.361

Población/Viviendas 4,16 3,62 3,03

El cuadro es significativo porque demuestra varias cuestiones. Se observa que mientras la población de San Luis creció, la cantidad de viviendas se incrementó también. La construcción de viviendas tuvo una tasa de crecimiento mayor que la poblacional. Es decir que los 20 años entre 1991 y 2010 la provincia tuvo una tasa promedio de crecimiento demográfico de 2,55% anual. Mientras que las viviendas crecieron a un promedio anual de 5,34% en ese período.

Por otra parte es importante la reducción del hacinamiento de la población, esto es, el amontonamiento de personas en las habitaciones. Mientras que en 1991 había aproximadamente una vivienda por cada cuatro habitantes, hacia 2010 hay una residencia por cada tres habitantes. Un progreso significativo de la construcción. Entre 1991 y 2001 se crearon 32.800 viviendas, mientras que entre 2001 y 2010 se realizaron 40.738 residencias.

El gobierno de San Luis emprendió construcción de viviendas todos los años entre 1991 y 2007, con la excepción de 1992 solamente. Ese período corresponde a la tercera, cuarta y quinta gobernaciones de Adolfo Rodríguez Saa, y al primer gobierno de Alberto Rodríguez Saa. El grueso de la construcción de casas se realizó durante los gobiernos de Adolfo, mientras que durante la gestión de Alberto la construcción muestra una tendencia de disminución.

Entre 1991 y 2000 de las 32.800 viviendas totales construidas antes mencionadas, el Estado provincial creó 18.921, esto es, el 58% del total construido, mientras que el 42% restante fue de iniciativa privada. Entre 2001 y 2010 se realizaron 40.738 viviendas, entre las que cuentan 12.017 que el gobierno construyó entre 2001 y 2007. Aunque aquí no disponemos del dato entre 2008 y 2010 para realizar la comparación.

Pero sea como fuere, se puede observar con exactitud, que el Estado provincial fue un gran impulsor de la construcción de viviendas, fomentando por ello la prosperidad de la población. Además cabe destacar que las residencias que el gobierno realizó fueron casas para albergar de 4 a 7 habitantes según el caso, por lo cual se fomentó bastante que gran parte de los habitantes de San Luis vivieran bajo techo.

Conclusión

Antes del retorno de la democracia en 1983, en San Luis predominaba una estructura productiva primaria y terciaria. Desde entonces, la provincia en conjunto con el Estado nacional fomentaron la industrialización por medio de las leyes nacionales 22.021 de Régimen de Promoción Industrial y la 22.702 de puesta en práctica de los beneficios impositivos a la actividad secundaria en la región de Cuyo. Por la ubicación estratégica de San Luis como ruta del Mercosur, y la creación de parques industriales en Villa Mercedes y la Capital de distrito, las inversiones crecieron vertiginosamente: el valor agregado de la industria pasó de 8.665.000 pesos en 1983, a 142.682.000 en 1991.

En 1989 el Régimen de Promoción industrial quedo suspendido para San Luis, por lo que el gobernador Adolfo Rodríguez Saa y su hermano el Senador Alberto gestionaron ante el Estado nacional la reapertura del beneficio industrial. Así fue como en 1991 el presidente Carlos Menem y posteriormente el ministro de economía Domingo Cavallo extendieron el beneficio impositivo a San Luis mediante decreto. Desde entonces hasta 2006 el producto bruto interno de la provincia se triplicó: de 236.504.981 pesos a ser de 654.438.985 pesos.

En cuanto al desempleo, siguió una tendencia paralelamente a la del total país, ya que las crisis económicas que sufrió la Argentina afectaron la economía de la provincia, pero en San Luis la desocupación fue siempre inferior. Desde 2004 hasta 2011 llama la atención los muy bajos índices de desempleo de la provincia. Todo ello fue posible por el crecimiento económico e industrial posibilitado por las leyes de Promoción Industrial.

Aunque cabe destacar que en la generación de empleo el Estado provincial participó activamente: el 34,9% de los trabajadores de San Luis pertenecen al sector público, mientras que el 64,7 trabajan en empresas privadas. Mientras que la industria emplea alrededor del 14% del total. Es decir, que aunque el crecimiento industrial hizo crecer la economía de la provincia, generando gran cantidad de empleos, fue el Estado provincial quien acompañó el crecimiento del empleo.

Además, en el aumento de la prosperidad de la población participó el Estado de San Luis en cuanto a la construcción de casas se refiere. Es que la cantidad total de viviendas pasó de 68.823 en 1991, a 142.361 en 2010. O sea, mientras que la población creció en ese periodo a 2,55% promedio por año, la construcción de viviendas creció al 5,34% por año. De haber en promedio una residencia por cada 4 personas, en 2010 se llegó a una vivienda por cada 3 habitantes. En ese crecimiento del total de hogares el Estado provincial participó activamente. Entre 1991 y 2000 el Estado provincial creó 18.921 viviendas, el 58% del total construido; mientras que entre 2001 y 2007 la provincia aportó una cantidad de 33% del total de construcciones aproximadamente.

Así fue como el Estado provincial, mediante políticas públicas que fomentaron el crecimiento industrial y económico, la creación de empleos públicos, y la construcción de viviendas sociales, ayudó significativamente a mejorar el bienestar de la población. Aunque es necesario afirmar que no observamos indicadores de pobreza, ya que a pesar de que San Luis llegó cerca al pleno empleo, hay que observar los salarios, la distribución de la riqueza, la movilidad de empleos, entre otras cuestiones. Pero en líneas generales se puede afirmar que mientras haya mucho empleo y viviendas para la gente, y todo ello fomentado por el Estado provincial, la aceptación general de la población de la gestión gubernamental vigente puede llegar a mantenerse. Es que la población puede observar que todas aquellas políticas públicas fueron obra del oficialista Partido Justicialista, más precisamente, por los líderes los hermanos Rodríguez Saa. La aprobación de la gestión de los Saa sería una variable importante para explicar porqué la gente sigue votando al oficialismo ininterrumpidamente desde el retorno de la democracia en 1983 hasta 2015.

Bibliografía

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· INDEC. Censo Nacional de Población, Hogares y Viviendas. 2001

· INDEC. Censo Nacional de Población, Hogares y Viviendas. 2010.

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· Olguín, J., Páez, M., Bussetti, M. San Luis, ¿provincia rica, población pobre? 5° Congreso Nacional de Estudios del Trabajo. Agosto 2001.

· Varesi, G. La configuración del modelo postconvertibilidad: Políticas y clases. Algunas claves para su caracterización, 2002-2007. Cuestiones de Sociología (5-6), 27-54. En Memoria Académica.

[1] Olguín, J., Páez, M., Bussetti, M. San Luis, ¿provincia rica, población pobre? 5° Congreso Nacional de Estudios del Trabajo. Agosto 2001. [2] San Luis, ficha provincial. Ministerio de Economía y Finanzas Públicas. Octubre de 2015. [3] Extraído de Encuesta permanente de hogares continúa. Dirección Provincial de estadísticas y censos de San Luis. [4] Dirección provincial de Estadísticas y Censos. Secretaría de Estado, Legal y Técnica. Gobierno de la Provincia de San Luis.